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“El punto fuerte de la cantera aragonesa es el interés que se toman todos por mejorar día a día”

Pablo Ruiz es – por el momento – el único Técnico Deportivo de nivel 1 que hay en Aragón. Como tal, forma parte desde hace unos meses del Comité Técnico y en las próximas semanas va a ir asumiendo progresivamente las labores del Responsable de Menores de este estamento. Afronta un reto importante en una etapa frenética de un deporte en continuo crecimiento y contesta nuestras preguntas al respecto.

¿Qué supone ser el Responsable de Menores de la FAP? ¿Qué funciones asumes?

Supone un reto importante, es dar alas a un deporte en plena ebullición con sentido y pies en la tierra y más aún cuando se trata de dar progreso a los más jóvenes e intentar que los chicos y chicas se sigan divirtiendo con el deporte una vez que se adentran en la competición.

Las funciones que se me han encomendado es seguir la progresión de los más jóvenes (hasta que dan el paso de junior hacia arriba), lidiar junto con el Comité Técnico en aspectos de formación  y tecnificación, hacer todo lo posible para que los chicos y chicas se diviertan se sientan arropados por la Federación y conseguir un conjunto de jugadores que con rotaciones entre ellos nos representen de la mejor manera posible fuera de nuestra Comunidad Autónoma, ya sea a nivel individual, de parejas o por equipos.

¿Cuáles son tus objetivos a corto, medio y largo plazo?

A corto plazo hemos tenido ya un primer logro que fue realizar, de manera creo que bastante satisfactoria, la actividad extraescolar gratuita que se celebró recientemente. Y aprovecho estas líneas para reiterar mi agradecimiento a los niños, niñas, padres, madres, monitores y clubes que hicieron posible esta jornada, así como al Gobierno de Aragón que también nos dio un impulso, y por último a todos los clubes que se ofrecieron y no pudieron participar.

A medio plazo trataremos de formalizar algo similar a una escuela de alto rendimiento donde los chicos y chicas puedan mostrar sus progresos a lo largo del año, para que estos se vean recompensados en la asistencia y participación con la Selección Aragonesa de Pádel.

A largo plazo, mi intención, como la de la Federación, es afianzar las ramas que tenemos en crecimiento como son los torneos del Circuito Aragonés de Menores y sus formatos, los Juegos Deportivos en Edad Escolar, su difusión y  crecimiento en competición y la tecnificación, con programas específicos de mejora para los menores.

Creo que uno de los apartados en los que me gustaría empezar a trabajar también sería el seguimiento y “cuidado” de aquellos chavales que han dejado de ser menores para la competición, pero que todavía no están preparados para los absolutos (sub 23).

En esta temporada el Circuito de Menores ha traído varias novedades. La más importante de ellas, la posibilidad de doblar categoría. ¿Cómo crees que va la temporada?

El doblaje de categoría ha sido una apuesta de este nuevo Comité Técnico, después de escuchar sugerencias y solicitudes para que esto se pudiera llevar a cabo. Este año está en periodo de observación, puesto que no habiendo muchas parejas en competición, está bien la posibilidad de jugar en varias categorías sobre todo para aquellos chicos y chicas que muestran una clara superioridad de nivel frente a parejas de su misma edad. Pero esto también tiene un contrapunto ya que a veces se obliga a los niños a jugar varios partidos en la misma jornada y a los jueces de la competición a hacer encaje de bolillos para cuadrar los partidos para que no se solapen.

¿Cuáles son los puntos fuertes del pádel de menores en Aragón? ¿Cuál es la salud del pádel aragonés de menores con respecto al pádel nacional?

Como punto fuerte del padel aragonés de menores destaca la cantera que empezamos a tener y el interés con el que se lo toman todos y cada uno de ellos: padres, técnicos, clubes, jugadores... Es importante destacar cómo están apostando los clubes existentes por las escuelas de pádel en cada uno de sus centros.

Por lo que respecta al padel nacional, no podemos tirar las campanas al vuelo, hay que ser realistas y saber que tenemos que subir dos o tres escalones para poder medirnos con otras Comunidades  y tener posibilidades de traernos la victoria a casa. Eso sí, a día de hoy podemos destacar algunas parejas que están haciendo buenos papeles consiguiendo buenos resultados en los TyC y plazas y buenos resultados en los TyC Premium.

En este sentido, ¿qué proyectos de futuro tiene la FAP con respecto a los menores?

Un proyecto que tiene la FAP para los menores que es de medio y largo plazo es el de la tecnificación. Desde que me incorporé a este equipo estamos dando vueltas para hacer un planteamiento anual para esta actividad, en la cual se intentará comprometer tanto a monitores, padres y jugadores para que se pueda desarrollar de manera efectiva y duradera en el tiempo, para poder formar una cantera con valores añadidos.

¿Cómo se va a articular esta actividad?

La articulación de la tecnificación se quiere basar en una serie de concentraciones de fines de semana, donde los chavales convivan entre ellos, con nosotros y con los entrenadores, conociéndonos entre nosotros y conociendo los jugadores diferentes maneras de entrenar y de sacar partido a las sesiones. En estas concentraciones se quieren abordar temas tan distintos como la nutrición, buena alimentación, el físico, la recuperación, la táctica, comportamiento grupal, interrelación personal…

El objetivo es acabar en una última concentración de 4 ó 5 días, previo al Campeonato de España de SSAA de menores, para afinar la preparación y motivación de los chavales de cara a la competición.

¿Qué consejos darías a los padres de los chicos/as que están compitiendo y de los que quieren empezar a competir? ¿Y a los entrenadores?

Hay que mantener la calma en los partidos y dejar que los chavales se saquen las castañas del fuego, si están compitiendo es porque quieren - o debería ser así – y por lo tanto tienen que saber llevar el tanteo, solventar situaciones difíciles, saber qué bola es buena y cuál mala...

Hay que mantener la ilusión por el juego y la pasión por divertirse. No nos puede valer el “qué bueno eres el mejor” un fin de semana y al siguiente el “puf que mal lo has hecho”. Animar a jugar y divertirse y a saber que hay muchos chavales mejores que los nuestros a los que hay que felicitar y saber aprender tanto de ellos como de la derrota.

Está claro que la competición es dura y agridulce, pero creo que hay que incitar desde casa a los chavales a participar en ella, para que luego puedan decidir por ellos solos si les ha gustado o no.

A los entrenadores solo les puedo decir que adelante con el trabajo que están haciendo que seguro que tiempo después se ve recompensado, ya sea en victorias(los más ambiciosos) o en chavales que practican un deporte porque su entrenador ha sido capaz de meterles el gusanillo en el cuerpo para que sigan practicando.

A nivel normativo y reglamentario a los entrenadores que de verdad vean en este deporte un futuro, que se formen, que obtengan los títulos necesarios para el cumplimiento de la Normativa. Sabemos que esta Comunidad es pequeña, que en este deporte tan joven nos conocemos todos y a veces las críticas vienen por el exceso de celo en la aplicación de las normas. Sin embargo, creemos que este es el camino para profesionalizar y asentar nuestro deporte y darle el valor que merece. Sólo tenemos que fijarnos en el espejo que tenemos a nivel nacional o simplemente el de otras Comunidades vecinas con más experiencia y recorrido, en el que para ejercer de entrenador se pide la correspondiente acreditación en regla y actualizada, lo que creo que nos ayudará a dar un paso más en el progreso de este deporte.